Cori Torroja, intensidad
emotiva, fuerza expresiva, abstracción poética
Busca la no forma para plasmar con
naturalidad su tendencia hacia la expresividad y la transparencia de las
emociones. Con la abstracción se siente más libre, porque no busca describir
sino insinuar, de tal manera que el espectador se siente libre, interpretando a
su manera lo que la autora catalana presenta.
Es una creadora que se siente
vital, que no renuncia a la existencia, a la actitud de alcanzar la formulación
y el deseo de que lo que hay es lo que uno crea a partir de lo más hondo.
Emociones, sensaciones, emociones
de la fortaleza del espíritu, emociones que se trasladan con determinación con
la fuerza del momento, en pos de la abstracción poética.
Una abstracción de índole
alegórica que bebe de las fuentes de las sensaciones, de la dinámica de
pensamiento y actuaciones personales, que son partes de un complejo organigrama
vivencial, en el que se mantiene y se entretiene con total soltura y
determinación.
Y ello es así porque la evidencia
de la existencia es parte vital de una actitud que surge a partir de la propia
constatación de lo natural, de la naturaleza que se posiciona con fuerza,
formulando deseos de amplificando la sensación de bondad y finura, emoción
contrastada y expresividad de carácter.
De las emociones articulación de
posibilidades, encuadrándolas en perfectas composiciones, en conjuntos de
posibilidades plásticas, bien sea en sus pinturas que buscan las conexiones
sutiles con el mundo sensorial o bien a través de sus pinturas-instalación,
articuladas, con movimiento, buscando la expresión de distintos estados de
ánimo.
Estados de ánimo que surgen de una
dinámica clara de ver la vida de tal forma que son como un docudrama en
distintos actos pero con final feliz, porque siempre hay esperanza.
Joan Lluís Montané
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA)